martes, 16 de febrero de 2016

16 de Febrero y yo con estos pelos!!!

16 de Febrero y yo con estos pelos!!!
Sí señoras y señores, llevamos mes y medio de 2016 y yo aun sigo con mis propósitos en el bolsillo y sin escribir…

Cuando una no tiene remedio lo mejor que puede hacer es asumirlo. Pero puede que formen parte del club de destarifados y emocionados de la vida que ya ni se acuerdan de sus objetivos anuales (del que soy miembro de honor). Entonces, tienen suerte y aquí estoy yo para recordarles que cada día se puede empezar. 

Siempre te puedes hacer el cool de la oficina diciendo que tu acabas de comenzar el año
Si los chinos pueden, por qué no tú?!


Si ya has comenzado y vas por el buen camino, porque estas cumpliendo alguno de tus propósitos, mi más sincera enhorabuena. 

Pero si no es el caso, que no cunda el pánico que aún tenemos mucho año por delante. Siempre dicen que lo primero es escribirlos. Hace un par de años, lo puse en práctica, y escribí los míos. Y lo cierto es que ayuda, aunque te parezca una soberana tontería, tenerlos concretitos delante de tus ojos hace que sean más fáciles de recordar y lograr.


Por otro lado, no vamos a engañarnos, quién vale en lo pequeño vale en lo grande
Aquí servidora peca de idealista y luego me quedo como estoy y sin haber avanzado nada. Así que este año voy ponerme cosas concretitas y de lo más sencillas. A algún@s hasta les dará la risa al leerlos, pero cuando van pasando los días, las semanas y los meses la cosa se complica y es ahí donde nos cuesta luchar. 

Ale, no me enrollo más ahí van los míos:

1. Volver a hacer deporte:

Llevaba un año sin ejercicio y recordaba con nostalgia abuelil aquellos tiempos mozos en los que correr 6km era parte de la rutina. 

No se me vengan arriba y no fijen fecha para la maratón de NY. Hagan el favor de comprarse unas buenas mallas térmicas y salgan a correr.
No es por las gorduras, esas nos embellecen, hasta Barbie está mas mona con unos kilitos


Se lo digo de todo corazón, es por su salud mental. Y si son progenitores sabrán de lo que les hablo. Nada de bugaboo runner ni de ir con los niños al parque a jugar. Correr detrás de los peques cuenta como deporte extra pero no como el ejercicio del día. 

Busquen un ratito de soledad o enganchen a su mejor amig@ y muevan el esqueleto. Encuentren el deporte que más les guste o el que menos tortura suponga y a por ello. 

Que da pereza, toda la del mundo pero a principios de Enero volví a correr y no pude sentirme mejor. 

Te sentirás morir llen@ de calambres tras el primer entrenamiento pero la sensación de comerte el mundo no te la quita ni la bronca de tu jef@ ni el pesado de tu vecino.

2. Aprender a decir que NO

Sí, querid@s es imposible llegar a todo y no salir lastimad@ por el camino. Así que practiquen el "no". 

Partiendo de la base de que un@ no puede caer bien a todo el mundo. Si a eso le añadimos que por ocuparse de todo no dan extra puntos, el resultado no puede ser más aliviador. 

Y si…?! El maldito "y si" entra en acción cuando nos disponemos a negar.
Miren, los superhéroes son de carne y hueso, y también lloran, se estresan y tienen días mierder. Así que no se va a hundir el planeta porque le digas a tu amiga que no puedes ir al plan, porque le digas a tu jefe que mañana le mandas el documento y te vas a casa a jugar con tus niños o porque seas el rancio del grupo que no se une a las dichosas cervezas…

Tengo comprobado que decir que sí y luego no cumplir, sienta sumamente peor que un "no" dicho a tiempo. He sido muchas veces de las que han querido complacer a todos y llegar a todo, pero este año me borro.

Porque cuesta mucho decir que no, pero cuando un@ se libera madre mía que bien sienta!!


3. Llevar bolso y arreglarse más

Este va dedicado a las féminas que estáis leyendo. Parece superficial y frívolo pero no me juzguen tan pronto. (Ellos pueden pasar al último párrafo)

Todo tiene su sentido. Además de que los Reyes Magos me regalaron varios bolsos (indirecta muy directa, me juego el tipo con el Sr. Zitos Zitos cada vez que abre la bolsa del carrito. 

Porque amigas, se produce un binomio mamá-carrito muy difícil de romper. Te encuentras yendo a todas partes con tu carrito así que algo bueno tenía que tener: la bolsa. 

En ella, además de los enseres de bebe incluyes todos los "por si acaso" que te puedas imaginar, más lo que ya llevabas en el bolso. Y te vuelves un poco comodona, el bolso para qué?! Eso sí, la bolsa que no me la quiten o muero
Y aquello no tiene desperdicio, podrías montar un mercadillo con lo que llevas y hacerte de oro. 

 Por ello, me he propuesto usar bolso de nuevo, porque sino un día de estos aparece un perchero o una planta al más estilo Mary Poppins.


Por otro lado, no seamos rancias, estoy segura de que tienes muchas cosas que conjuntandolas con algun chollo rebajil y los complementos adecuados, te hacen no sólo estar divina de la muerte sino que hasta disimulan las ojeras de no dormir. Así que fuera pereza, esforcémonos en dos o tres conjuntos monos que nos saquen de los días de apuro y nos hagan sentir las reinas del mambo. 


Y para los hombres que se hayan saltado ya dos o tres párrafos, no sean bobos y díganles un buen piropo a sus mujeres y si son madres tres o cuatro, que ser mamá e ir con tacones detrás de la criatura es ya nivel olimpiadas. 


4. Aprender a escuchar:

Tengo que admitirlo, me encanta hablar. No se que sería de mí si fuera muda…
Pero a pesar de ello, pienso que tenemos dos orejas y una sola boca, por algo será.

Estamos tan atareados que no escuchamos al otro, sino que oímos lo que dice y mientras pensamos en nuestra respuesta, en el cómo vamos a contestarle, en vez de atender y acoger lo que nos está contando. 

Porque escuchar, no sólo supone tener las orejas limpias y poner atención, supone ponerse en los zapatos del otro. Tratar de entender lo que dice, cómo lo dice, porque lo dice…


Si escuchasemos más, las cosas nos irían mejor. Y lo digo por todos, tanto por los que hablan demasiado(entre los que me incluyo) como por los que ponen cara de escuchar pero viajan a mundos paralelos mientras el otro habla.

Y el último y más difícil…

5. Sonreir a pesar del cansancio

Sonreir cuando el mundo es perfecto y estas rodeado de unicornios y florecitas de colores es lo más fácil. Pero cuando el día se tuerce, el sueño se acumula y los nervios se tensan, la cosa se complica amig@s.

Es ahí, donde vale más esa sonrisa, esa buena cara, esa palabra de cariño…
Porque estar cansad@ no es un estado civil, no tiene que determinar ni nuestras horas ni nuestros días. Porque podemos hacer el mundo  mucho más agradable con muy poco.

Anímense, que esto tiene que ver con la fuerza de voluntad igual que el resto de propósitos. Roma no se contruyó en dos días y las batallas las ganan los soldados cansados. 

Así que por favor, sonrían que además de ser gratis anima el alma. La suya, la del vecin@ e igual hasta consigue que el ogro de turno o la gruñona de siempre después de su decimoctava sonrisa esboce un pequeño gesto de alegría.


Y esto es todo!! Quizás les parezcan pocos pero son de los importantes y ahora que están escritos no me queda otra que cumplirlos…

Miles de besos,

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